EL CULPABLE
LAS CONSECUENCIAS

Estrecho
El cajón de residuos ocupa un espacio considerable, por lo que colocarlo directamente dentro hace que la máquina sea voluminosa a la vez que limita el tamaño de la zona de basura.

Impecable
Es imposible mantener ese canal interno limpio y limpio. Al cruzarlo, se acumulan grumos de polvo y arena. Insectos espeluznantes también pueden atravesar el canal hasta el cajón de residuos, proliferar en su interior e incluso colonizar todo el aparato.

Apestoso
Se guardan los desechos durante unos días antes de cambiar la bolsa. Sin control de origen, ninguna de las técnicas conocidas de purificación de aire tiene la capacidad suficiente para neutralizar los olores, cada vez más fuertes. Es natural que el orinal adquiera un olor insoportable con el tiempo.

Endeble
Los excrementos de gato también emiten vapores y sustancias químicas corrosivas, penetrantes y destructivas. Estos viajan por el canal y se extienden por toda la máquina, corrompiendo gradualmente los componentes sensoriales, eléctricos o metálicos, lo que provoca fallos esporádicos y, finalmente, una avería total.

Arriesgado
Al girar el tambor, se abre y se cierra el canal interno, lo que aumenta la posibilidad de cortar al gato. En teoría, podría producirse un accidente mortal.
LA SOLUCIÓN
Almacenar los desechos del gato en un contenedor de basura exterior, eliminando así cualquier canal interno.